Don Quijote le pide al ventero que lo arme caballero después de que él (Don Quijote) vele sus armas. A falta de capilla Don Quijote vela sus armas en el patio de la venta poniendo sus armas sobre una pila. Cuando unos arrieros tratan de sacar agua de la pila son atacados por Don Quijote lo que arma un gran alboroto. El ventero decide abreviar y armar caballero a Don Quijote con ayuda de la Tolosa y la Molinera. Como Don Quijote no traía dinero y el ventero ya quería verlo fuera de la venta le deja ir sin cobrarle nada.
Link al Capitulo III en audio en SPN4 aquí.
Dios haga a vuestra merced muy venturoso caballero y le dé ventura en lides. – la Tolosa
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Dios haga a vuestra merced muy venturoso caballero y le dé ventura en lides. – la Tolosa
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