Un caluroso día de julio, sin decirle nada a nadie Don Quijote decide salir, montado en Rocinante y con su armadura y sus armas, a deshacer agravios, enderezar tuertos, enmendar sinrazones, mejorar abusos y satisfacer deudas. Se da cuenta de que aun no ha sido nombrado caballero y esperando encontrar otro caballero que lo hiciese nombrar continua su peregrinar pasando un día completo sin toparse con alguien. Al anochecer encuentra una venta a cuya entrada se encontraban dos prostitutas, que se reían del extraño personaje. Lo recibe el ventero y las prostitutas lo alimentan ya que Don Quijote no pudo quitarse su armadura y su celada.
Link al Capitulo II en audio en SPN4 aquí.
"Nunca fuera caballero
De damas tan bien servido
Como fuera Don Quijote
Cuando de su aldea vino:
Doncellas curaban de él;
Princesas, del su rocino"
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"Nunca fuera caballero
De damas tan bien servido
Como fuera Don Quijote
Cuando de su aldea vino:
Doncellas curaban de él;
Princesas, del su rocino"
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